Motivos por los que se desgasta el cepillo de dientes

Para saber por qué motivos se desgastan los cepillos de dientes primero deberíamos saber cómo está hecho un cepillo de dientes.

La parte más importante es el cabezal, obviamente porque es la parte que está en contacto directo con la boca y la que hace la mayoría del trabajo. El cabezal está formado por filamentos que tienen terminaciones redondas para evitar cualquier daño para las encías y los dientes. Hace varios años, estos filamentos eran naturales y con terminaciones romas que dañaban las encías y dientes.

La dureza de los cepillos de dientes depende del diámetro de los filamentos usados. Además para definir la dureza también interviene la longitud del filamento. Así tenemos que los cepillos más suaves son los que tienen los filamentos más largos y los de mayor dureza son los que tienen los filamentos más cortos. Las durezas que  se pueden encontrar en el mercado son: ultrasuaves, blandos, medios y duros.

Los factores por los que el cepillo de dientes se desgasta son dos principalmente: la dureza del cepillo y la técnica de cepillado. Los cepillos con dureza más suave se estropean con una mayor frecuencia que aquellos que tienen una dureza mayor. Ejercer demasiada presión a la hora de cepillarse los dientes ayuda a que se desgasten antes los cepillos.

Por lo tanto, los odontólogos recomiendan el cambio de cepillo de dientes cada tres meses como máximo. ¡Si anteriormente a esa fecha se ve un excesivo desgaste de las cerdas será el momento de hacer el cambio!

 

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